Llamadas featurephones en los años 90, las aplicaciones para teléfonos inteligentes, tabletas y otros dispositivos móviles han registrado una impresionante evolución pasando de ser simples videojuegos y tonos de llamada o aviso de mensajes en la época del surgimiento de la internet, a verdaderas herramientas para resolver asuntos laborales, académicos e incluso familiares en la era actual. En un mundo en constante evolución, las empresas buscan las herramientas más rentables y eficaces para lograr sus objetivos y por ende su desarrollo. En esta búsqueda, las aplicaciones para aparatos móviles ofrecen recursos novedosos para el crecimiento de las compañías a nivel global.
Esto es posible gracias a que cada día se crean nuevas aplicaciones dirigidas a satisfacer las necesidades de las empresas, pudiendo ser descargadas a través de las plataformas de distribución digital como Google Play y App Store. Los emprendedores pueden navegar entre las categorías de Economía y Empresa, Finanzas, Productividad y Utilidades, en búsqueda de las aplicaciones que le permitan potenciar sus negocios.
Ahora bien, muchos negocios ya tienen presencia en el mundo online a través de las páginas web, pero un emprendedor, al crear una app para su marca o empresa, le permitirá a todos sus clientes actuales y potenciales buscar, consultar información de su compañía e incluso comprar desde cualquier lugar del mundo, las 24 horas del día y los 365 días del año, con tan solo revisar su teléfono móvil.
Otra ventaja de utilizar estos programas informáticos, es que un empresario, empleando únicamente su smartphone, puede mantenerse conectado en todo momento con su compañía a través de una app, aumentando de esta forma su eficiencia y notoriedad ante la competencia, así como reduciendo sus costos administrativos.
Como dato curioso, según proyecciones de Portio Research, para el año 2017 alrededor de 4.400 millones de personas en todo el planeta descargarán y utilizarán al menos una aplicación para dispositivos móviles, lo que se traduce en que cada vez más usuarios realizarán sus labores diarias empleando estos programas.
Otra estudio realizado por la empresa de mercadeo eMarketer, revela que en Latinoamérica durante el año 2015 habían unos 155,9 millones de teléfonos inteligentes, de los cuales el 84% se encuentran en Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Perú; y se estima que esta cifra se mantendrá casi invariable hasta el año 2019. Esto representa un vasto mercado para las aplicaciones móviles solamente en esta parte del mundo.
Por otro lado estas apps, aparte de ser un canal de conexión directa entre la marca y el público, permiten recibir una retroalimentación constante de los usuarios, lo cual puede ser utilizado como un insumo valioso para mejorar nuestras estrategias de mercadeo y ofrecer al público una vía de atención fácil y cómoda.
Finalmente, las empresas siempre deben buscar la forma de satisfacer las necesidades de los clientes y aumentar su notoriedad para ganar terreno en el mercado. Al utilizar los recursos que hoy por hoy ofrece la tecnología, podrán llegar a un universo amplio de usuarios y a su vez beneficiarse de las bondades que las aplicaciones tienen para ofrecer.