En el momento que parece que los objetivos de renovación y modernización de los modernistas comienzan a alcanzarse, porque la burguesía ha hecho suyo el programa social, político y cultural del movimiento, aparece una nueva generación de jóvenes, que plantearán nuevas alternativas: los novecentistas.[1]
Este grupo irrumpe con fuerza en el panorama cultural a partir de 1906. Habían hecho suyo el principal objetivo de la generación modernista: la voluntad de normalizar la cultura, de modernizarla y ponerla a la altura europea. Pero lo harán desde posturas conservadoras y de dirigismo cultural, por lo que criticarán todo lo que el Modernismo tenía de anarquía y de individualismo. El programa novecentistaacabará triunfando y eso significará el agotamiento progresivo del movimiento modernista, el final delque suele situarse alrededor del 1911.[2]
En líneas generales a literatura modernista se caracterizó por:
– La búsqueda del arte total con la incorporación de diversas manifestaciones artísticas a lastécnicas literarias.
– La reproducción de las tensiones entre el artista incomprendido y la sociedad burguesa. La influencia del vitalismo de Nietzsche y de Ibsen se dejó notar en los personajes, dotados de unafuerza espiritual que les lleva a la marginación, al liderazgo, a la soledad ya la incomprensiónpara estar por encima del sistema de valores de la sociedad Burguesa.
– Sinceridad y verismo. El autor intenta reproducir sus estados de ánimo a través del comportamiento de sus personajes y los objetos descritos de manera subjetiva.-
La defensa de la lengua moderna, aunque sin normativizar, pero depurada de barbarismos y vulgarismos. Los modernistas buscaron los modelos lingüísticos en el mundo rural, donde el habla presentaba una castellanización menor. Los poetas modernistas adoptaron los corrientes poéticas más importantes de la Europa de finales desiglo:
– El parnasianismo: El parnasianismo es un movimiento literario francés de la segunda mitad del siglo XIX creado como reacción contra el romanticismo de Victor Hugo, el subjetivismo y el socialismoartístico.
Los fundadores de este movimiento fueron Théophile Gautier (1811-1872) y Lecontede Lisle (1818/94). El parnasianismo surgió como una antítesis del romanticismo y sus «excesos»; exceso de subjetivismo, hipertrofia del yo (crecimiento excesivo y anormal), exceso de sentimiento. En contra que los parnasianos preconizaron una poesía despersonalizada, alejada de los propios sentimientos y con temas que tuvieran que ver con el arte, temas sugerentes para ellos mismos, bellos, exóticos, con una marcada preferencia por la antigüedad clásica, especialmentela griega, y por el lejano Oriente.[3][4]
En cuanto al estilo, los parnasianos tenían mucho cuidado de la forma. Continente y contenido tenían que ir de acuerdo. De esta manera, si los románticos demostraron una preocupación por los sentimientos, los parnasianos lo hicieron por la belleza. El lema del parnasianismo era: «el arte por el arte», arte visto como forma y no como contenido.[5]
– El simbolismo: Movimiento artístico, esencialmente pictórico, del último tercio del XIX, que presenta imágenes opuestas a la realidad visible o científica para demostrar que existe una realidad escondida que, si no es posible conocer, es al menos posible de intuir (Un tema constante fue el de la mujer, venerada o temida, ser angelical (Ofelia) o maligno (Salomé).
También lo fue el de la muerte, con la alusión al más allá. A menudo la mujer y la muerte van unidas: una lleva a la otra, según los simbolistas. Técnicamente e ideológicamente los simbolistas no aceptaron ni el academicismo ni el realismo, y se alejaron también deel impresionismo.[6]
– El prerafaelismeesta corriente poético busca la belleza en un mundo idealizado. Toma coma modelo los poetas y los caballeros medievales. Asimismo la mujera quien se dirige es o bien una mujer pura, virginalo inocente, o bien una dama sin piedad. La novela modernista no crea formas nuevas sino que potencia las viejas con actitudes modernistas.
No prescindieron totalmente del Naturalismo y del costumbrismo, por ejemplo, sino que los reconvierten con un nuevo tratamiento. También, adaptarán las tensiones conflictivas entre el intelectual y la sociedad, tensiones que vienen representadas por las series binarias: personaje / ambiente; hombre / mundo; individuo / masa.
– Costumbrista. Se adapta la unidad estética del cuadro de costumbres pero no el contenido. Se tiene menos tendencia a la construcción de una trama narrativa sino a la desintegración de la novela en una serie de escenas / narraciones independientes.
– Decadentista. No refleja una realidad objetiva sino una realidad interior, oculta, no describe el mundo físico sino los efectos que produce. En esta novela, de carácter tanto subjetivo, la fealdad y el color son valorados estéticamente y el erotismo y la sensualidad se convierten en temas frecuentes.
– Novela rural. Con el Romanticismo empezó a aparecer un gran número de narraciones cortas y de novelas de tema rural que iniciaron una moda muy extendida durante la década 1900-1910: el ruralismo. Sólo una parte recogió los conflictos ideológicos de finales de siglo, esta es la novela modernista.
[1] P. Cerezo Galán, Palabra en el tiempo. Poesía y filosofía en Antonio Machado,
Madrid, Gredos 1975. Pp. 81 – 152
[2] Acereda, Alberto (ed.), El Modernismo poético. Estudio crítico y antología, Salamanca, Ediciones Almar, 2001.
Crespo, Ángel (ed.), Antología de la poesía modernista, Tarragona, Ediciones Tarraco, 1980.
Esteban, Ángel y Sabido, Vicente, Antología del modernismo literario hispánico, Granada, Comares, 2001.
[3] P. Cerezo Galán, Palabra en el tiempo. Poesía y filosofía en Antonio Machado,
Madrid, Gredos 1975. Pp. 81 – 152
[4] Acereda, Alberto (ed.), El Modernismo poético. Estudio crítico y antología, Salamanca, Ediciones Almar, 2001.
Crespo, Ángel (ed.), Antología de la poesía modernista, Tarragona, Ediciones Tarraco, 1980.
Esteban, Ángel y Sabido, Vicente, Antología del modernismo literario hispánico, Granada, Comares, 2001.
[5] P. Cerezo Galán, Palabra en el tiempo. Poesía y filosofía en Antonio Machado,
Madrid, Gredos 1975. Pp. 81 – 152
[6] Acereda, Alberto (ed.), El Modernismo poético. Estudio crítico y antología, Salamanca, Ediciones Almar, 2001.
Crespo, Ángel (ed.), Antología de la poesía modernista, Tarragona, Ediciones Tarraco, 1980.
Esteban, Ángel y Sabido, Vicente, Antología del modernismo literario hispánico, Granada, Comares, 2001.
Fernández Molina, Antonio (ed.), Antología de la poesía modernista, Madrid, Ediciones Júcar, 1982.
Fuentes Hernández, Víctor (ed.), Poesía bohemia española. Antología de temas y figuras, Madrid, Celeste Ediciones, 1999.
Gimferrer, Pere (ed.), Antología de la poesía modernista, Barcelona, Seix Barral, 1969; Barcelona, Península, 1981.
Gómez Bedate, Pilar (ed.), Antología de la poesía modernista, Barcelona, Hermes, 1999.
Gullón, Ricardo (ed.), El modernismo visto por los modernistas, Barcelona, Guadarrama, 1980.
Autor: Wang Jung