Indudablemente, que el ruido en una empresa, afecta mucho a las personas, pero para tener una idea más clara de este asunto, vamos a ver cómo afecta el ruido a los trabajadores de una empresa, tomando en cuenta que tipo de ruido sea y del tipo de empresa a que nos vayamos a referir. Las empresas se mantienen en una constante lucha para tratar de resolver este problema que aqueja a los trabajadores hasta extremos incalculables.
El problema radica, en que debido a algunos tipos de ruidos estridentes, los trabajadores pueden desarrollar un tipo de patología de origen profesional al cual se denomina hipoacusia. Como quiera que el ruido de una u otra manera, sea agudo o no, afecta siempre a las personas, las empresas que lo originan se mantienen constantemente en la búsqueda de una solución para que no afecte a los empleados que allí laboran.
No es solamente la parte auditiva la que se ve afectada en estos casos, también debemos tomar en cuenta la parte psicológica, la cual no deja de quedar afectada por los ruidos, que de por sí, son una energía acústica que puede ser percibida por el oído humano.
Ya sabemos, que existen en la naturaleza otros ruidos, los cuales por encontrarse en otras frecuencias, el ser humano no puede percibirlos. Es el caso del aterrador ruido que produce la tierra en sus desplazamientos de rotación y traslación.
Pero vamos al caso que nos ocupa en este momento, y que es el ruido producido por diferentes maquinarias, o motores que operan dentro de las fábricas e industrias. Sin tomar en cuenta el que puedan producir las plantas eléctricas de energía. Estos ruidos molestos, como ya dijimos no solo nos afectan fisiológicamente, sino que nos pueden afectar a nivel psicológico, dado que alteran todo el sistema nervioso. De manera pues que se ha dado por definir a estos ruidos como sonidos no deseados.
Los efectos que pueden causar los diferentes tipos de ruido en el entorno laboral
Vamos a tratar de resumir de la manera más entendible, Los efectos que pueden causar los diferentes tipos de ruido en el entorno laboral, y es que se pueden dividir básicamente en dos tipos que son los efectos fisiológicos, y los efectos psicológicas. Tenemos con que los de efectos fisiológicos, son aquellos que se pueden apreciar a simple vista, ya que se hacen presentes en la disfunción de algunos órganos que forman el aparato auditivo, principalmente el tímpano.
Pero si vamos a analizar los daños que nos pueden causar los molestosos ruidos desde el punto de vista psicológico, pudieran ser menos perceptibles al resto de las personas no afectadas, pero para el paciente, se pudieran llegar a convertir en un verdadero karma, pues tal vez no sean tan fáciles de detectar por un especialista, y mucho menos achacarle el malestar de la persona al problema de los ruidos.
Es por este motivo que a nivel empresarial, es muy difícil de lograr aceptar la corresponsabilidad de la empresa o del patrono, para asumir su cargo en cuanto a indemnizaciones o tratamientos en que se vean implicados patrono y empleado.
¿Cómo se puede atacar el foco de la contaminación acústica?
Dado que el problema de los ruidos molestos provenientes de las diferentes empresas que operan con grandes maquinarias, se ha convertido en un gran caso por resolver, estas se han visto implicadas en la búsqueda de la mejor manera de enfrentarse a resolver esta situación y de cómo se puede atacar el foco de la contaminación acústica.
Es por esto que se ha dividido la estrategia en tres grandes pasos, el primero es atacar al aparato que genera el molestoso ruido, es segundo es como se puede hacer para evitar el medio que lo trasmite y finalmente como se puede defender al trabajador de los efectos que estos ruidos pudieran perjudicarles.
Por ejemplo, una de las maneras es tratar de alejar al trabajador en la medida de lo posible, de los sitios de donde provienen los ruidos, más esto es algo que no siempre se puede evitar dado el caso de que en muchas oportunidades el trabajador requiere estar operando las máquinas. Pero también, se recurre en estos casos a implementos como tapa oídos y protectores industriales de las partes auditivas.
Otra de las formas en que se puede atacar este problema que afecta a los trabajadores, es la utilización de materiales aislantes como el corcho y una buena idea, que muchas empresas han puesto en práctica para aislar en la medida de lo posible los ruidos, es forrando las paredes de los galpones con cartones de huevo.