Seguramente, conoces al escritor Robert Kiyosaki o por lo menos lo has oído mencionar, ¿no lo recuerdas? De acuerdo, tal vez si te menciono la obra que lo catapulto a la fama tu panorama se aclare: Padre Rico, Padre Pobre”. ¡Ah ahora si le recuerdas! Ese libro que de manera sencilla te mostraba cómo la forma de pensar interviene tajantemente en la administración personal de las finanzas y por ende de nuestra vida.
Pues, luego de ese libro existe una segunda entrega, si se quiere de forma continuada a Padre Rico, Padre Pobre, denominada “El cuadrante del Flujo del Dinero”. En esta oportunidad, el libro busca mostrar las diferentes visiones que respeto al dinero tenemos y que nos ubican en una posición financiera diferente al resto de las personas. Además, analiza la importancia de comenzar a prepararnos educativamente en cuanto a las finanzas y el tema del dinero, ya que en su mayoría somos “económicamente analfabetas”, destacando que solo el 3% de la población mundial, es dueña del 97 % de las riquezas, en contraste con el 97% de la población poseedora de sólo un 3% de dichas riquezas.
Seguridad Vs. Libertad en el cuadrante de R. Kiyosaki.
Sin embargo, lo más destacado de todo el libro es precisamente el esquema o diagrama en torno al flujo del dinero, que al observarlo nos lleva a una introspección al preguntarnos: ¿Dónde estoy ahora? Y más importante aun ¿A dónde quiero dirigirme? Para comprenderle fácilmente, hagamos un ejercicio de imaginación. Visualiza una matriz o esquema dividido en cuatro sectores, dos ubicados a la derecha y dos a la izquierda.
Pues bien, el factor motivador, del sector izquierdo será la seguridad de contar con un ingreso, por mínimo que sea, engloba a aquellas personas que reciben un ingreso lineal, es decir en proporción a su esfuerzo y tiempo dedicado al trabajo, en este caso, se trabaja para que el dinero fluya. A su vez, existen dos tipos de personalidades económicas.
- La persona “E”, o el empleado, es decir, aquel individuo que trabajo para otros en calidad de dependencia laboral y económica.
- “A”, es un autoempleado, pese a poseer mayor libertad con respecto a toma de decisiones y rendición de cuentas a superiores que el empleado, por ser dueño de un pequeño negocio propio, sigue en calidad de dependencia pues el dinero circula en medida de su trabajo.
En contraste, del lado derecho, motivados por la necesidad de libertad financiera, se encuentran quienes no trabajan para el dinero, sino a la inversa, el dinero trabaja para ellos, asi es posible encontrar a:
- Dueño, aquí se es propietario de un negocio propio próspero que no necesite de nuestra presencia para funcionar.
- Inversionista, aquí ya sin necesidad de dedicar mayor tiempo, el dinero empieza a fluir casi de forma automática, es la máxima aspiración de las personas.
Como habrás podido notar, cada uno de estos estadios, poseen importancia dentro de los sistemas económicos, para que puedan funcionar efectivamente, no obstante, depende de ti, ubicarte en tiempo y espacio, sobre donde te encuentras y adonde quieres llegar. Y si te localizaste en el lado izquierdo con ansias de tocar el derecho, no te angusties, es posible, solo se trata de aprovechar las oportunidades que se te presenten y arriesgarte lo necesario. ¿Crees que posees lo necesario para ello?