La escuela en la actualidad se encuentra constantemente cuestionada por su papel en el uso de las TIC, aparecen preguntas y cuestionamientos alrededor de la forma como la escuela debe ser participe en el uso de las nuevas tecnologías, de la nueva información y de las nuevas formas de comunicarse que tiene el ser humano a partir de los diferentes dispositivos móviles, los software y hardware que en mercado día a día tiene a disposición de los consumidores que cada vez son más.
La era digital ha llegado y a tocado a la escuela poniéndola en diferentes posiciones de las cuales tiene la opción de salir o dejarse atrapar; hay quienes ya se han atrevido a plantear y poner a la escuela en un estado débil y que tiende a desaparecer, el maestro ha llegado a ser reemplazado por los computadores y demás dispositivos móviles; y la información que circula en internet reemplaza el conocimiento adquirido en las aulas a partir de estrategias de enseñanza y aprendizaje que durante muchos siglos llevo a los maestros a pensar y repensar la forma de desarrollar y enseñar un contenido y/o una temática.
Pero no solamente hay quienes ubiquen a la escuela y su papel en la educación del ser humano en el tren del olvido, también hay quienes la ubican en un lugar de protagonista en la tarea de reivindicar la educación y hacer de las TIC medios y herramientas para el aprendizaje donde se deben repensar los currículos y plantear diferentes formas de enseñar, nuevas estrategias pedagógicas, haciendo de la era digital una herramienta de enseñanza para aprendizajes significativos.
Hay quienes sostienen que los niños y las niñas de la actualidad son seres que gracias a la tecnología nacieron con un “chip digital” y que esto los hace diferentes a las generaciones que precedieron sobre todo en lo referente a lo que aprenden y la forma como lo hacen, pero la pregunta no es si hay o no tal “chip”, o si la escuela está siendo desbancada por las tecnologías o peor aun los maestros por Las computadoras, la pregunta y las preocupaciones deben estar encaminadas en preguntar ¿por qué? Y ¿cómo? Usar esas tecnologías existentes que están ahí y que ya está marcando a los educandos que día a día ocupan las aulas de las escuelas e instituciones educativas.
Es apropiado en este momento centrar nuestra atención en los dos grandes ejes, en primer lugar las TIC, como ya se ha mencionado el uso de las tecnologías y la información tienen a la educación en una doble posición, una es la escuela que queda descartada en el proceso educativo y la otra, y en la cual se apoya el propósito de este ensayo, la escuela reivindicada y con propuestas nuevas para el proceso educativo. En segundo lugar está el currículo, las implicaciones de lo ¿qué? se enseña, ¿para qué? y ¿Cómo?, pero no es solo responder a estas preguntas, si no también observar, de qué manera las nuevas tecnologías, y su uso intencionado lleva a la formación de personas que responden a los objetivos e indicadores que ya se encuentran en los estándares y lineamientos establecidos para el uso de las TIC.
La función de la escuela y no menos del maestro es y ha sido educar a los niños y las niñas del presente y del futuro y esta tarea no puede quedarse en el olvido ni mucho menos ser concedida a las tecnologías, por lo que la escuela debe prepararse para reivindicarse en su papel formador, es importante que el maestro asuma la tecnología como medios, que traen consigo una forma de representar una cultura; nuevas formas de comunicación solo así comprenderá que la tecnología por sí sola no anula el papel de la escuela y mucho menos del maestro, es cuestión de atender a las necesidades de los niños y las niñas, las cuales no son manifestadas pero están presentes. Se hace necesario comprender que los estudiantes traen consigo saberes previos, que hay en ellos información a partir de la cual se pueden establecer nuevos aprendizajes, los medios digitales ocupan en la actualidad un papel importante en la vida de los estudiantes que a diario se encuentran con los maestros que parecen estar “desconectados” del mundo que sus educandos viven por fuera de la escuela.
Pero el problema no solo se queda en desconocer los intereses de los estudiantes, sino en omitir que los medios digitales llevan a los niños y las niñas a interacciones con otros, de forma diferente a los adultos y estas interacciones llevan a desarrollar habilidades y competencias que el maestro desconoce. He aquí una de las brechas entre la escuela-educación con la era digital y los estudiantes, la escuela no se preocupa por vincular los conocimientos de sus estudiantes y las competencias que han desarrollado con lo que ella pretende evaluar según el currículo y los lineamientos que tienen establecidos para la evaluación de habilidades.
Entonces es correcto decir ¿que la era digital llego anulando la educación y por ende a la escuela y al maestro?, ha sido más fácil pensarlo así, y dejar de lado los retos que traen los cambios acelerados de los últimos siglos, si bien es cierto que las TIC traen grandes desafíos para la educación y que la ponen en una incómoda y cuestionada posición; también es de pensar en lo que estas ofrecen, ya que como lo plantea el Modelo de Integración de las TIC al Currículo Regular (MITICA). Encontrado en http://www.eduteka.org/modulos/8 “Los cambios acelerados que producen en la sociedad las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), a la vez que entrañan grandes retos, ofrecen un enorme potencial para transformar la educación.
Ellas posibilitan realizar los cambios necesarios para ofrecer una educación actualizada y de calidad, generando con su utilización adecuada Ambientes de Aprendizaje enriquecidos (AAe).” De la escuela y de los maestros depende en gran medida que el uso de las TIC, lleven a la educación a ser una propuesta novedosa para los niños y las niñas, por lo tanto es necesario que la escuela genere espacios y estrategias para brindar educación de calidad, no es solo cuestión de dotación y de accesibilidad como lo plantea Lafrancesco en el texto “Estructuración de estándares curriculares en la educación básica colombiana”, la calidad educativa y su mejoramiento no es solo una cuestión de cobertura y de dotación, esta calidad implica además “redefinir los estándares curriculares y asegurar altos niveles en el desarrollo de los procesos formativos en la educación integral que imparten las instituciones a través de sus proyectos educativos”.
El brindar educación de calidad lleva a la escuela a atender a la necesidad, de indagar y reconocer los conocimientos, habilidades y competencias (entendidas como saber ser, saber pensar y saber hacer en un contexto determinado) que los estudiantes han desarrollado de forma autónoma con el uso de las TIC y trabajar en pro de estas, para responder a las demandas que en la actualidad el medio y la sociedad productiva y competitiva hacen del quehacer humano. Todo esto lleva a los maestros y a las escuelas a repensarse, rediseñar, implementar y evaluar los aprendizajes adquiridos mediante y con el uso de las TIC.
Mas allá de que la escuela pueda llegar a una desaparición y el maestro a ser reemplazado, es una cuestión de reevaluar su papel ante los cambios constantes que vive y continuara viviendo, la brecha digital que tanto se menciona en la actualidad va mucho más allá de la accesibilidad y en la escuela esta brecha está ligada a la forma, a las estrategias, a la metodología, al currículo y la forma como este es repensado ante la llegada de la nueva información, las nuevas tecnologías y las nueva forma de comunicarnos.
El currículo como tal debe replantearse pensando en brindar una educación de calidad que vaya mucho más allá del mero hecho de dotar, debe ser pensado desde las demandas actuales, en donde los estándares curriculares sean coherentes con los lineamientos curriculares y con la adquisición de unos logros actitudinales, procedimentales y conceptuales, lo que quiere decir formar en competencias cognitivas, de desempeño y disciplinares.
BIBLIOGRAFIA
– Buckingham, D. (2008). Más allá de la tecnología. Aprendizaje infantil en la era de la cultura digital. Buenos Aires: Manantial. Cap.9
– Lafrancesco, G (2003). Estructuración de estándares curriculares en la educación básica colombiana
– Modelo de Integración de las TIC al Currículo Regular (MITICA). Tomado el 17 de Junio del 2012 a las 3:30 pm http://www.eduteka.org/modulos/8
Escritor: Yuly Marcela Osorio Arango