El talante filosófico de la obra de Antonio Machado, tanto de la prosa como la poesía, es suficientemente manifiesto como para haber sido reconocido en abundantes estudios. Ahora bien, el valor filosófico de una obra literaria se puede dar de varias maneras.
En el caso del estudio de Machado no se trataría sólo de discernir qué contenido filosófico podrían contener sus textos, sino de reconocer que se trata de una manera de hacer filosofía. así, por ejemplo, José Luis Abellán afirma que Machado es un filósofo en el sentido pleno de la palabra, siempre que reconozcamos que exista y sea válida una tradición asistemática y ametòdica de hacer filosofía. De hecho, a Machado, un autor que expresaría filosóficamente a través de la poesía o de la prosa literaria, no sería excepcional, sino que se insertaría en una tradición hispánica de hacer filosofía, desarrollada muy a menudo a través de formas predominantemente literarias.
También según Abellán, a pesar de que la filosofía de Machado se puede encontrar en el conjunto de sus textos literarios, se debe entender eminentemente desde la poesía, dado que en gran medida es una reflexión filosófica sobre la poesía. Avanzando unos pasos más, queremos proponer aquí la tesis de que dentro de la filosofía que se desprende de la literatura de Machado, la ética ocupa un lugar central.
En varios estudios encontramos también el reconocimiento del valor moral esencial de los textos machadiana. El componente ético de su prosa es indiscutible, y se expresade forma explícita. Añadamos que sus estudiosos defienden que existe una unidadprofunda entre la prosa y su poesia.
Ahora bien, aunque traten de las mismas cuestiones, poesía y prosa lo harían con modalidades distintas, sin por ello perderninguna de ellas la posibilidad de expresar independientemente a fondo los mismos temas.En cuanto a la poesía, es claro que permite hacer fácilmente una lectura ética a partirdel simple método de analizar los contenidos, existentes en el caso de Machado deforma indisputable. En este sentido, el significado de su poesía yde su propia lectura poética aparece con todo su esplendor cuando es leídadesde nociones filosóficas y éticas.
Un estudio bastante reciente de Elisa Rosales hace una propuesta que pretende ir aún más allá. Para Rosales, hay que estudiar el modo como se construye el poema, ya que no es su contenido el responsable del comportamiento ético, sino la forma como éste seconfigura: hay que estudiar lo ético como procedimiento, no como contenido.
Por esta razón, la poesía-entendida de esta forma-es acción y tiene capacidad de educación moral. Todo ello encaja perfectamente con los ideales y doctrinas ético-pedagógicas que sabemos que la habían marcado ya las cuales se había adherido vitalmente Antonio Machado, hasta influir también con coherencia su forma cotidiana de vivir.Lo que acabamos de exponer nos ayudará ahora a discernir una muestra de relación entre ética y literatura.
Autor: Wang Jung