Desde la mitad de la década de los años 90, el fenómeno de la descortesía ha sido un tópico de interés tanto para los investigadores en el área de la Pragmática como para la sociedad. A pesar de que la mayoría de las investigaciones han estado enfocadas al estudio de la cortesía, es de hecho su opuesto el que causa conflicto social y pasando a ser condenado por la sociedad. Hoy se pueden contar diferentes enfoques al estudio de la cortesía partiendo desde Lakoff hasta Brown y Levinson. El estudio de estos últimos ha sido usado como plataforma para estudios posteriores.
Jonathan Culpeper (1966) presentó la primera teoría sobre el estudio de la descortesía basada en Brown and Levinson (1987), planteando una definición de descortesía, los diferentes tipos de descortesía y una lista de estrategias relacionadas con este fenómeno. A partir de lo anterior, Culpeper revisa y completa su propia teoría sobre el fenómeno de la descortesía, revisiones que incluyen la participación de elementos no verbales de la comunicación que forman parte del fenómeno de la descortesía. El trabajo presentado por Culpeper ha sido utilizado para futuras investigaciones sobre el uso de las estrategias de descortesía en diferentes contextos.
1. Pragmática. La Pragmática es una subdisciplina de la lingüística que estudia el significado de las oraciones en contexto. Sin embargo, esta es meramente una breve explicación de lo que realmente trabaja esta disciplina. La pragmática es la encargada de relacionar el conocimiento de la filosofía, sociología y la lingüística, y estudia lo que se puede realizar a partir del uso del lenguaje. Considerando que el lenguaje no es solamente utilizado para declarar sobre hechos específicos, de hecho existen diferentes fuerzas que son utilizadas a través del lenguaje con el fin de concretar ciertos efectos sobre el receptor. Es por eso, que la relación entre una oración y su contexto extralingüístico es más que una simple declaración. Por ello, la descortesía es parte del estudio de la Pragmática, porque es el uso del lenguaje el que daña o ataca el prestigio de las otras personas.
2. Cortesía. Para comprender la descortesía, es ineludible entender su contraste positivo, la cortesía. Esta último definida por Brown and Levinson (1987) como un medio por el que grupos opuestos son capaces de comunicarse entre ellos. Entre otros aspectos, tanto la cortesía como la descortesía son universales y están atados culturalmente. Esto quiere decir, que la cortesía y la descortesía en todas las lenguas comparten principios abstractos, pero cambian de acuerdo a las especificidades de cada cultura. Watts (2003), como una crítica al modelo de Brown y Levinson, nota ciertos fenómenos claves sobre la cortesía que fueron dejados de lado por los autores, remarcando el rol del receptor dentro del acto de la descortesía y las diferentes maneras en las que puede reaccionar, enfatizando que las estrategias de descortesía no elegidas de manera consciente de acuerdo a la situación y que más de una estrategia puede ser usada de manera simultánea.
3. Imagen Pública. Brown y Levinson (1987) toman el concepto de prestigio de Goffman (1967). La imagen pública es lo que gente quiere para sí misma. Hay dos formas diferentes de imagen pública que quieren lograr los hablantes: positiva y negativa. La imagen positiva refiriéndose al deseo de la persona de ser aprobado y la imagen negativa que es el deseo del hablante de no ser interrumpido por su interlocutor en sus acciones. Todas las personas modelos, como se conocen a los hablantes fluidos de una lengua, poseen ambos tipos de imagen públicas. Es por eso, así como la cortesía en sí misma, que la imagen pública es universal y también posee especificaciones culturales.
3.1 Actos de amenaza de imagen. El acto de amenaza a la imagen es cualquier tipo de comunicación verbal y no verbal que voluntaria o involuntariamente que intimida la imagen de otras personas, tanto positiva como negativamente. El primero no muestra interés sobre los sentimientos del oyente y el último que afecta la libertad de acción del oyente. (Brown y Levinson, 1987).
3.2 Actos de amenaza de imagen (AAI) y cortesía. Como la imagen es tremendamente vulnerable, todas las personas modelos tratan de mantener la imagen pública de otras personas con el fin de evitar perder su propia imagen. Es por eso, que con el propósito de no dañar la imagen de otros, las personas modelos, como agentes racionales tratan de evitar los actos de amenaza (AAI) o minimizar la amenaza (Brown and Levinson, 1987).
4. Estrategias de cortesía. Brown y Levinson (1987) propone una serie de estrategias de cortesía relacionadas con el uso de las AAI:
a) Realización del acto de amenaza de modo explícito
b) Cortesía positiva
c) Cortesía negativa
d) Realización del acto de amenaza de forma implícita
e) No realización del acto de amenaza.
5. Descortesía. Culpeper (1996) postuló una teoría de descortesía basada en Brown y Levinson (1987). Culpeper define la descortesía como el comportamiento que buscar causar ofensa. Esto quiere decir, es un acto que voluntariamente amenaza el prestigio del otro. La descortesía está también delimitado por el contexto, lo que significada que algunos actos no pueden ser descorteses en todas las situaciones. Culpeper distingue entre una descortesía inherente y una descortesía falsa. Por un lado, la descortesía falsa no pretende causar ofensa pero intenta mostrar solidaridad social o intimidad. Comúnmente, mientras más cercana sea la relación entre dos personas, menos es el grado de cortesía. Por otra parte, la descortesía inherente se refiere a actos de habla descorteses que no pueden ser evitados.
Es importante mantener en cuenta que la descortesía está absolutamente ligada al contexto, recordando de sobre manera la clasificación propuesta por Leech (1983) entre lo que es una cortesía relativa y absoluta. La relativa haciendo referencia a actos que pueden considerados descorteses de acuerdo a un contexto en particular, mientras que la descortesía absoluta es siempre descortés, independiente del contexto en el que se encuentre.
6. Conclusión. Como resumen, la descortesía, como comportamiento es comúnmente condenada por la sociedad, y es por lo mismo que ha sido un foco de atención dentro del estudio de la Pragmática. Diferentes teorías y modelos han sido presentados por diversos investigadores. Es importante recalcar el hecho que el estudio de la descortesía está recién comenzando. Es por esto, que muchas teorías y modelos han sido criticadas y replanteadas.
Escritor: Arantxa Irizar.
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