Desde hace unos 3 años la nanotecnología se ha hecho presente pero a gran escala, es decir, aunque sea una tecnología que manipula componentes a escala nanométrica, ha ayudado mucho a la medicina y otras ciencias. La aplicación principal de la nanotecnología era sin lugar a dudas los componentes: dispositivos más pequeños para que no se recalienten, chips procesadores de información más potentes, baterías más pequeñas pero con más capacidad, entre otras… Pero cuando el mundo de la medicina comenzó a meterse con la nanotecnología empezaron a crearse aplicaciones increíbles, el trasplante de órganos es una de ellas y aquí te los presentamos.
El trasplante de órganos
El trasplante de órganos sencillamente se basa en sustituir un órgano porque está dañado o porque ya realmente no funciona en un cuerpo. Es una técnica que se estudió mucho y se practicó primero en animales para poder relacionar bien las arterias, las conexiones del órgano, ente otras características… Sin embargo, en el trasplante de órganos se necesita mucha rapidez, tanto para sustituir el órgano o porque en el proceso de quitárselo a alguien puede dañarse, por eso, la nanotecnología ha llegado a la medicina para potenciar lo que es el trasplante de órganos.
Ayuda de la nanotecnología
Ahora veamos ¿Dónde entra la nanotecnología? Si estas enterado, existen mallas protectoras capaces de hacer reaccionar al corazón de un paciente ¿cómo? Repitiendo sus contracciones hasta que realmente vuelve a funcionar como debe ser… Es increíble pero muy cierto, todo se hizo gracias a la nanotecnología para que fuera además de flexible muy funcional y que se pudiera monitorear cada una de sus acciones, eso por la parte de hacer reaccionar un órgano, pero si vamos a mantener un órgano ¿Qué podría hacer la nanotecnología? Realmente más de lo que te imaginas, aquí te explicamos…
Las nanopartículas creadas a partir de la nanotecnología hacen que un órgano pueda calentarse a cantidades de hasta 200º grados Celsius por minuto, es decir, el órgano ya sea un corazón o un hígado podrá mantener todas sus condiciones y propiedades biomecánicas, de esta manera, puede hacerse con un poco de paciencia la extracción de un órgano de una persona o animal y luego trasladarlo a otra persona o animal a la que será destinado. Ahora vemos como realmente la nanotecnología puede mantener todo un órgano funcionado lo suficiente para hacer un trasplante de órganos, algo innovador pero que le falta aún mucho camino.
En prueba de experimentos
Es muy cierto que la nanotecnología no ha fallado mucho y tal vez es uno de los proyectos más innovadores para la medicina, sin embargo, las pruebas no se están llevando a cabo en personas justo ahora, es muy arriesgado poner la vida de alguien en una balanza con una tecnología que aún no está desarrollada al 100% o al menos un 80% de probabilidades que vaya a funcionar… Por ahora solo seguirán con experimentos de animales, ya que su sistema es muy parecido al nuestro y puede practicarse lo suficiente.