Los ejercicios de bajo impacto están destinados a cuidar tu cuerpo, sobre todo tus articulaciones, de las lesiones que ocurren normalmente al practicar deportes. Estos ejercicios están pensados para todos quienes se inician en la práctica deportiva, tienen alguna condición física especial, enfermedades cardíacas, sobrepeso, o simplemente se están recuperando de una antigua lesión. Porque se llamen «de bajo impacto» no significa que los debes tomar a la ligera, en realidad requieren de un gran compromiso y constancia.
Este tipo de ejercitamiento entra en la categoría de aeróbico, es decir, mediante una práctica prolongada pero de intensidad suave a moderada se alcanza un ritmo cardíaco elevado que promueve la utilización de calorías reservadas en el cuerpo -tejido adiposo, grasa-. Progresivamente, estas prácticas conllevan a un mejoramiento del sistema cardíaco, pues fomentan un mejor consumo y utilización del oxígeno; dando como resultado una mayor vitalidad y energía para tu cuerpo.
La caminata es una de las formas más conocidas de ejercitarse sin mucho riesgo a lesiones, es sencilla y puede ser practicada por todos, sin importar mucho la edad. Puede ser realizada en distintas intensidades, dependiendo de la condición de cada persona, y se necesita muy poco para empezar, un par de zapatillas y ropa cómoda servirá para salir a caminar un rato por el parque o la plaza cerca de casa. También puede ser practicado en familia, sirviendo como tiempo de calidad entre compañeros y amigos. A medida que vas progresando, puedes probar subir la intensidad de la caminata, llevando un paso más vigoroso que permite aumentar tu resistencia y quemar más calorías. Una caminata de seis kilómetros realizada en una hora te hará perder aproximadamente unas 350 calorías.
La natación es altamente recomendada, no sólo como deporte de bajo impacto, sino como terapia para tratar lesiones y diversas discapacidades. La natación implica coordinación y destrezas, sin embargo, existen muchos programas para personas mayores donde pueden practicar a su ritmo y nivel, o incluso probar con clases de danza o aeróbics acuáticos. Nadar es un deporte exigente, y tan solo en 30 minutos puedes conseguir quemar de 200 a 300 calorías, e incluso más. Asegúrate de realizar estas prácticas en establecimientos con personal especializado, y no sobre exceder tu límite físico.
Los paseos en bicicleta pueden ser una manera divertida de mantenerte saludable, sin embargo, requiere de más implementos y habilidades para practicar ciclismo de manera segura. Si es la primera vez que intentas pasear en bicicleta en la calle, es mejor hacerlo en grupo, alrededor de personas más experimentadas. La bicicleta que usas también es importante para un buen desempeño, una bicicleta muy grande o muy pequeña puede ocasionar lesiones. Si eres principiante y estás en busca de tu primera bicicleta, debes evaluar exactamente cuál es el propósito que pretendes alcanzar. Para paseos cortos, dentro de la ciudad, a un ritmo suave, lo mejor es una bicicleta playera o bicicleta de paseo. El corte bajo del cuadro y el manillar alto, te ayuda a mantener una postura derecha pero relajada.
Tai-chi, Yoga, y Pilates, estas tres modalidades son muy beneficiosas para la salud, y se adaptan a diversos niveles, permitiendo ser practicada por deportistas profesionales como personas sin condición fisíca. El Tai-Chi consiste en progresiones de posiciones que conforman un movimiento de defensa personal. El Yoga ha estado en mucho auge en los últimos años, y es que brinda diversos beneficios para la salud, aparte de reducir el estrés ayuda a tonificar el cuerpo y quemar grasa corporal. En cuanto a los pilates, cuenta con aspectos similares al yoga, pues se trata de posiciones y movimientos en los que contraes y relajas los músculos, sin embargo, los pilates suelen ser practicados en un nivel más intenso.