La consecución de los objetivos planteados por una empresa depende de las acciones y trabajo de su personal humano, cuando se trata de equipos de trabajo, se necesita que los mismos trabajen encausados a un mismo objetivo, para ello deben colaborar sinérgica e integradamente. Esta es la situación deseada y esperada por toda compañía, por ello se buscan y escogen entre varios candidatos a aquellos que se cree pueden integrarse a los demás y liderar o seguir las pautas para el logro de las metas. Sin embargo la realidad no siempre termina por complacer a todos y los equipos pueden llegar a fracasar, por eso hay que saber reconocer las señales de alerta que te pueden indicar sobre un equipo de trabajo disfuncional.
Trabajo en picada, resultados no adecuados
Cualquier buen director o gerente empresarial debe estar atento por si observa síntomas de decaimiento de la calidad del trabajo, pues ello conllevará a resultados no adecuados que comprometerán seriamente la estabilidad de la empresa, si se identifican a tiempo se pueden llegar a corregir.
Una de las primeras señales de disfuncionalidad en los equipos de trabajo es el hecho de perder mucho tiempo sin llegar a conclusiones o resultados, bien puede haber situaciones que requieran mucho tiempo para su análisis y discusión más no es normal que luego de varias horas de reuniones no se llegue a ningún resultado y solo se termine con la sensación de haber perdido el tiempo. Es importante además, reconocer algunos tipos de comportamientos como: incumplimiento de horarios de reuniones, altercados o dispersión y distracción.
Sumado a esto hay que supervisar muy bien las tareas que cumple cada miembro del equipo, puesto que si hay solapamiento o vacío en las tareas a ejecutar estamos ante un claro caso de falta de coordinación que puede generar confusiones y que algunas acciones se cumplan por partida doble y otras no se logren. La falta de comunicación, que es otra de las señales de alerta puede a su vez ser la causa de esta confusión de tareas, los miembros del equipo deben mantenerse informado entre sí de sus avances o dificultades.
La falla en el trabajo de una persona puede llegar a causa del fracaso de todo un grupo de trabajo, especialmente cuando se trata de la persona encargada de conducirlos, pues se llegará a un estado donde no hay motivación en los demás participantes. Por otro lado, si los miembros del equipo son muy individualistas, estamos ante otro problema, es bueno que tengan cierta independencia pero son un equipo y por lo tanto deben funcionar como tal. Esta misma separación y falta de comunicación generada entre integrantes de los equipos de trabajo ocasionan la pérdida de rumbo e incumplimiento de objetivos, ya sea porque se trabajan en diferentes metas, no hay motivación o los mismos se desconocen.
Una vez identificadas estos signos de alerta en un equipo de trabajo disfuncional es posible aplicar los correctivos necesarios para solventar la situación irregular, ya sea aclarando las pautas de trabajo, fijando reglas y modos de trabajo a los miembros conflictivos o excluyendo e incluyendo a personal ajustado a las necesidades.